El teclado y el ratón son parte de una serie de interfaces y controles físicos que quizás, están a un paso de desaparecer o reinventarse por completo. En esta disyuntiva tecnológica surge LEAP, un nuevo proyecto que nos lleva a interactuar con nuestro Mac mediante gestos y movimientos naturales. Por 69$ podrás controlar tu iMac como Tom Cruise en Minority Report.
¿Hasta donde llegarán las maneras de interactuar con nuestro ordenador? El binomio teclado y ratón parece condenado, poco a poco, al ostracismo. Durante años, hemos visto como los desarrollos en el campo de los controles por movimiento -que llegaron a las consolas hace relativamente poco tiempo- y las interfaces táctiles, parecen constituir una buena alternativa. Hoy os presentamos LEAP, un curioso proyecto para controlar y manejar el entorno Mac con el simple movimiento de nuestra mano.
LEAP es un dispositivo bastante barato. Por apenas 69$ podremos jugar, navegar por la web, interactuar con nuestro programa o aplicación preferida, ampliar una imagen, dibujar u ordenar los iconos de nuestro escritorio. Da lo mismo. Al igual que la exitosa plataforma de Microsoft, Kinect, LEAP es un pequeño gadget -de tamaño increíblemente reducido- que reconoce nuestros gestos y movimientos con gran fidelidad y naturalidad, y al parecer, sin lag o retrasos de ningún tipo.
Durante años, se ha especulado incluso que la misma Apple, podría estar detrás de un desarrollo parecido, intentado llevar nuevos gestos e interfaces a sus ordenadores Mac de la misma forma que lo hizo con el ecosistema multitáctil iOS tras la llegada del iPhone en 2007 o el iPad en 2010. Tanto Lion como Mountain Lion, sistemas operativos de Mac, incorporan gran variedad de gestos táctiles, con lo que el camino estaría prácticamente abierto e invitaría a recorrerlo con interesantes alternativas. LEAP es una idea muy interesante, pero quizás, debe afrontar su prueba más dura: resultar atractivo y lógico para una multitud de usuarios algo reacios a los cambios. Podéis encargarlo rápidamente ahora mismo, pues sus creadores envían a España -la broma saldría por menos de 85 dólares-, y según dicen, la cantidad es bastante limitada. Si estáis interesados, no perdáis demasiado tiempo.