El co-fundador de Apple comienza a hacerse un hueco en el imaginario colectivo. Tras su fallecimiento el pasado mes de octubre, los homenajes a la figura de Steve Jobs comienzan a sucederse de las más variadas formas. En Hungría, ya cuenta con su propia estatua.
Steve Jobs seguirá en nuestra memoria, de una manera u otra. El visionario empresario, permanecerá impertérrito y eterno en una nueva estatua dedicada a su persona en Budapest, Hungría. La figura que mide algo más de dos metros, hecha de bronce, ha sido esculpida por el artista húngaro Erno Toth bajo encargo de la compañía Graphisoft.
Dicha estatua, que reside en las oficinas centrales de la empresa y que muestra una imagen activa y propia del fundador de Apple, tiene varios motivos para su existencia. Dejando a un lado el sentido homenaje a la importancia de Jobs en el mundo tecnológico y en el de la informática en general, el presidente de Graphisoft, Gabor Bojar, ha querido trasladar su agradecimiento por el apoyo mostrado por Steve a su aplicación ArchiCAD.
«Éramos una compañía pequeña con recursos limitados, trabajando en un entorno confinado por la política y la economía de una Hungría comunista por aquél entonces» Gabor Bojar, fundador y CEO de Graphisoft
Aunque es cierto que la imagen general de la estatua deja que desear (es un poco libre en sus proporciones, por decirlo de alguna manera), lo verdad es que este tipo de gestos y de homenajes a la memoria del creador del Mac o el iPad, llegan de una forma especial. Nos demuestran, que más allá de sus productos y creaciones, Steve Jobs seguirá con nosotros.
Fuente: Techcrunch.com